El triunfo que necesitaba

Era lo que necesitaba para confirmar. Cuando la confianza crece, se necesita sustentar ese crecimiento en una hazaña mayor a las logradas previamente. Desde su intervención en los cuartos de final de la Copa Davis en Moscú (con tiunnfo ante un debilitado Nicolay Davydenko incluído), David Nalbandian necesitaba un triunfo que rompa con los esquemas, que lo afirme entre los mejores del momento y que demuestre que lo conseguido hasta aquí no era casualidad.

Ni Rajev, ni Chiundunelli, ni Simon, ni el actual Marin Cilic, ni Marcos Baghdatis -sus víctimas en la conquista en Washington, la semana pasada-; ni David Ferrer, ni Tommy Robredo están a la altura de la epopeya que hoy alcanzó el mejor tenista nacional de los últimos treinta años. Este regreso sólo se puede comparar con aquel de 2007, en el que en semanas consecutivas ganó los Masters de París y Madrid con victorias seguidas sobre los mejores del escalafón en ambas semanas.

En la tarde de hoy David venció ni más ni menos que al número 5 del Mundo, Robin Soderling. Aquel que no nos permitió ver la fineal "ideal" de Rolland Garros en las últimas dos ediciones y uno de los más duros del circuito. De esta manera y luego de un 4-6; 6-4 y 6-1, el Rey alcanzó su 11er triunfo al hilo, lo que es la mayor secuencia de victorias para él.

El andar del unquillense en la tarde de Toronto fue de menor a mayor, ya que más allá de la derrota, en el primer set su primer saque nunca lo acompañó y no le permitió sostener lo bueno que había hecho con las devoluciones. En la segunda manga el ex campeón del Masters comenzó a mejorar en el servicio y pudo dominar los puntos. En la última franja, sólo hubo un jugador en el court y fue el menos esperado. En la previa se suponía que en un partido largo, Soderling podía ser beneficiado, teniendo en cuenta la seguidilla de partidos del argentino luego del extenso parate.

Cuando el ex 3º del mundo le pega a la pelotita parece que nunca abandonó su mejor posición en el ranking, cuando se pone una meta en la cabeza es de temer hasta para los "extraterrestres" del cirucuito (Nadal y Federer). De hecho en el sorteo del draw del Masters canadiense, Rafa dejó escapar un "uf" cuando le tocó sacar la bolilla de David y armar así el duelo de primera ronda con su compatriota David Ferrer. Y fue el mismo Roger el que en más de una ocasión deslizó que el talento del córdobes era de número uno del Mundo.

Desde las 14 de hoy, será la capital canadiense la que vea un duelo de titanes entre Andy Murray y David Nalbandian (2-0 para el Rey en el head to head). De ganar, el héroe del tenis nacional será cabeza de serie en el próximo US Open, lo que le permitirá descansar la próxima semana y no ir al M1000 de Cincinatti. De perder alcanzará la 35º colocación en una lista que hace unos días lo tenía  muy por debajo de la barrera de los 100.